La metafísica que se nos avecina.

Manuel de León.- enero 2003

No suelo resistirme a lecturas de filosofía y teología. Había guardado de Internet un artículo sobre Historia de la metafísica, pero nunca lo había leído hasta hoy. Cuando lo  leí casi me da un ataque de “intrascendencia”. Por eso les pido que  me perdonen si me paso de “irreverente”. Todos saben que la metafísica es una disciplina que trata de la esencia de la realidad total y ello abarca también la totalidad de la vida y el universo. A lo largo de la historia, la explicación del mundo y del hombre, ha sido un esfuerzo constante. Creo, sin embargo, que ha predominado la idea de que la razón prima sobre la religión y esto ha traído reacciones y “olas” espiritualistas. Para Averroes las verdades metafísicas podían expresarse por dos vías, la filosófica y la religiosa. Sin embargo, (del mismo modo que Avicena) rechazó el concepto de la creación del mundo en el tiempo, es decir, que el mundo no tiene principio y, por tanto, sea Dios el “primer motor” que impulsa todo movimiento. Del mismo modo mantenían que  el alma emana del alma universal que es una. Todo ello  una mezcla de Aristóteles y Platón, filósofos que influyeron grandemente en la escolástica, la filosofía cristiana y, como yo creo, también hoy en la sociedad  occidental.

El artículo de metafísica al que me refiero era de la Nueva Era, que como se sabe recoge elementos dispersos de filosofía y religión y compone un paganismo de lo mas irracional y extravagante. Y si no juzguen: “El Maestro Saint Germain es el Avatar de la Nueva Era de Acuario y Director del Rayo Violeta Transmutador del Perdón y el Amor Compasivo. El recibe los títulos de ¨El Dios Libertad¨, ¨Avatar Acuarius¨, ¨El Rey de la Edad Dorada”. El primero de mayo de 1954, el Maestro Saint Germain fue coronado como El Rey de la Edad Dorada. Este hecho marcó el comienzo oficial de la Nueva Era.

El Maestro Saint Germain tiene como patrón electrónico la Cruz de Malta y por Llave Tonal, el Segundo Movimiento del Concierto de Aranjuez de Joaquín Rodrigo.

Y hay mas: Se considera que su radiación se encuentra en Su templo del Palacio del Propósito del Hombre, en la región etérica del Monte Avila-Caracas y en el Monte Shasta en California. Saint Germain es el padre de todos los grupos metafísicos y estudiantes de la Nueva Era.  Pero como uno es curioso por naturaleza, seguí indagando en esta clase de metafísica y miren lo que me encontré: “La Llama Violeta es la única energía en el Cosmos capaz de disolver y consumir el mal karma individual y colectivo, más todas las negatividades, aunque estén en su más denso estado de cristalización. La Llama Violeta es la Libertad.

La Humanidad va a ser salvada por la demanda de la humanidad misma y la asistencia de los Maestros Ascendidos a través del uso purificador del Fuego Violeta.

Así, que si tú quieres hacer una sólida labor de servicio a favor de la humanidad, ponte ya a trabajar en la invocación y expansión de la Actividad del Fuego Violeta. El logro final de tu rueda de reencarnaciones que es la Liberación, sólo puede ser alcanzado gracias a la Victoriosa Presencia del Fuego Violeta dentro de tu corazón, todos tus cuerpos internos y externos. Ha sido revelado que el Maestro Saint Germain es el que gobierna para toda la humanidad y para toda la Tierra, la Llama Violeta. El sólo hecho de decir "La Llama Violeta", "Maestro Saint Germain" o "Divina Presencia ¨Yo Soy¨ en conciencia del Ser, todo el ambiente en todos los planos se tiñe de color violeta.

La Llama Violeta es una actividad que los Maestros han enviado a la Tierra para ayudar a la humanidad a disolver todas sus dificultades: el pecado, mal karma, y mala suerte.

Como podemos ver, cuando se habla de vuelta de lo sagrado, de lo religioso, de cierto encantamiento en esta “era postsecular”, nos referimos a este paganismo irracional.  La mitología  griega y latina parecía simbolizar cosas mas profundas que las mencionadas, como, por ejemplo, el ciclo de la muerte y resurrección en el caso de Adonis. Parece que de nada ha servido la Ilustración y la Reforma para liberar a un hombre encadenado a tradiciones milenarias y que parece volver a la infancia, atontado de tanto ruido ya sea el  racionalista o el metafísico trascendental. No puedo entender que “la llama violeta” disuelva mis pecados, que la radicación   se encuentre en su templo del Palacio del Propósito del Hombre, en la región etérica del Monte Avila-Caracas y ¿porqué no en “la trompa de Eustaquio” del oído, que es algo muy sensible que permite la entrada y salida del aire equilibrando las diferencias de presión? ¿Porqué no? Y es que hemos convertido el corazón del hombre, la esfera de su intimidad y de su trascendencia, en una cueva de ladrones. No estaría mal recordar a una minoría protestante, que engendra en su seno visionarios de parecido calado e intérpretes de sueños tan alejados del propósito de la Escritura, para que instituyan en la sabiduría de Dios. La libertad cristiana debe servir para que nadie nos juzgue, pero debe evidenciar al que anda “vanamente hinchado por su propia mente carnal” Col 2:18